Hay un profundo MALESTAR que nace cuando vamos a salir de nuestra "zona de confort". Tira la piel del pecho al estirarse. El estómago se revela con fiereza y miedo. Pero si nos atrevemos a atravesar ese miedo, podremos habitar ese nuevo espacio expandido, donde sopla la brisa que hace bailar al alma.
Hay un profundo MALESTAR que nos invade cuando nos resistimos a salir de nuestra "zona de confort". Podrá respirar nuestro cuerpo aquí pero no nuestra alma que, aunque no muera, se apaga.
La vida es Transformación y Cambio. El malestar forma parte del ciclo de morir para renacer, y tendremos que elegir: el de la incertidumbre que rompe nuestros límites y nos lleva a crecer, o el de no atrevernos, que silencia nuestro espíritu.
Crucemos, amigos ♥ Con mucho amor,
