
Tras días de tener pesadillas por las noches referentes al libro (cuando iba a recogerlo habían añadido páginas con contenido extraño, la portada era de plástico y en el interior del libro había bolsillos por todos lados XD …), me encontraba al fin en la puerta de la imprenta muy nerviosa…
“–¿Habrá quedado bien? ¿Y ahora qué? ¿Gustará? ¿Podrá cumplir su propósito?” –me preguntaba con un nudo en el estómago.
Entonces miré el móvil y vi que eran las 18:18 del día 18. Respiré profundamente y supe que TODO IRÍA BIEN.
Estamos muy acompañados siempre, amigos.
Adelante con ese camino que lleva a nuestros sueños.
Mi siguiente paso: ¡RUMBO AL FESTIVAL de la semana que viene con los libros!
(Pronto enviaré el libro a quien lo pida).
Muchas gracias de corazón por vuestra presencia.
Myriam Aram