“–Dígame al menos si este chico le provoca esas emociones que tanto buscaba.
–No... –reconoció Marga apoyada en la pared, mientras su amigo se colocaba el sombrero en la cabeza–. La verdad es que no coincidimos mucho en gustos... A él no le apasiona leer, ni probar platos exóticos. No suele ir a caminar por el placer de hacerlo, ni le gusta viajar a lugares donde no comprende el idioma... ni tampoco hace reflexiones que me hagan pensar... Pero es normal no coincidir en todo, ¿no? A los dos nos gusta ir al cine, salir por ahí y jugar a los dardos –contó Marga deseando que su vecino aplaudiera su nueva relación–. Hay comentarios que tiene con sus amigos con los que no termino de encajar... ¡pero me hace reír mucho!, y me va a buscar a la librería. ¿Sabe?, es muy generoso y me siento acompañada. DESPUÉS DEL BAJÓN POR EL RECHAZO DEL OTRO, HA SIDO UNA SUERTE ENCONTRARLE –asintió convencida–. Es cierto que cuando se cierra una puerta se abre una ventana.
Julián había escuchado con atención su discurso.
–Cuando SE CIERRA UNA PUERTA SE ABREN MUCHAS VENTANAS –puntualizó él colocando el bastón en su antebrazo–. La cuestión es saber SI LE INTERESAN LAS VISTAS QUE OFRECEN ESAS VENTANAS, no en tomar la primera que se presente, porque alguna dará a un patio interior sin sol o al callejón de los contenedores de basura. No se conforme con lo segundo mejor nunca, porque entonces eso será lo que vivirá –dijo despidiéndose de ella con un movimiento de sombrero.”
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Myriam Aram
Feliz domingo de abrir ventanas que SÍ son las que queremos ;)
(© Texto extraído de la novela "Castillos en el Aire, Castillos en la Tierra". Autora: Myriam Aram)
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